Historias de Fuentetaja

Hace unas semanas apareció en la prensa la noticia de que los trabajadores de la librería Fuentetaja -bien conocida por los lectores de Madrid- se habían puesto en huelga. Ahora, por medios plantígrados, me llega una nota de prensa en la que se narra una historia -más bien unas historias- de Fuentetaja tan interesante como desconocida, al menos para mí.
De la nota, que deberían estudiar en los gabinetes de prensa por su corrección y pulcritud, reproduzco algunos párrafos y añado un par de enlaces.
"[...]nuestro nombre es fundamentalmente un signo de agradecimiento a María Fuentetaja, antigua propietaria y fundadora de la Librería.
La reciente muerte de María Fuentetaja, acaecida en el ejercicio de una dignidad propia de su espíritu libertario, hace que debamos extender esta aclaración con un postrero homenaje.
El primer taller literario impartido entonces por un joven Ramón Cañelles tuvo lugar en la cueva de la Antigua (y pequeña) Librería Fuentetaja, sita en el número 34 de la Calle San Bernardo y que todavía hoy regenta su hijo Bernardo Ayuso Fuentetaja —de forma del todo independiente a la Librería Fuentetaja moderna, hoy reubicada en el número 35 de la Calle San Bernardo tras declararse en ruina su antigua ubicación en el número 48 de la misma calle—.
Mientras María Fuentetaja fue copropietaria, junto a Jesús Ayuso, de la Librería Fuentetaja, ambos mantuvieron su apoyo durante nuestros primeros años para que el entonces único taller [...] tuviese en la Librería una dirección postal y un punto de encuentro ocasional con sus participantes.
Sin embargo, a partir del comienzo de los 90, y con el crecimiento de la actividad del taller, nuestras instalaciones se independizaron de la librería —en realidad el vínculo se limitaba por entonces a un buzón de correo— hasta concentrarse en unas oficinas en las que albergar en condiciones la sede de la editorial y los talleres literarios.
Respecto al conflicto que hoy vive la Librería, conviene aclarar que desde hace ya años María se había retirado de todo vínculo de propiedad con la Librería y que esta huelga no tiene ninguna relación con los tiempos en que todavía gestionaba parcialmente la institución.
Por último, queremos aclarar que los propietarios de Ediciones y Talleres de Escritura Fuentetaja nos sentimos identificados con el espíritu generoso y libertario con que María Fuentetaja siempre supo gestionar los conflictos y asumir las justas reivindicaciones.
Confiamos en que una institución como la Librería Fuentetaja sabrá acudir a esos valores que para nosotros simboliza el apellido de María para solucionar un conflicto que, tristemente, llega al poco de la pérdida de su fundadora. La mejor forma de honrar su memoria sería precisamente rescatar de forma coherente los valores que dirigieron su vida."
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