Los límites de la publicidad

Estuvimos viendo el otro día La pesadilla de Darwin, que es una pasada. Mejor que yo os la pueden explicar por ahi. A la conclusión lógica que sacamos tras comprobar que lo que es una pesadilla es ser europeo y occidental, se unió la reflexión sobre el consumo desmedido, sobre el hecho de que no sólo cubrimos nuestras necesidades elementales básicas, sino que las sobrepasamos con creces.
Esta es una civilización tan consumista que hemos convertido a la publicidad en el verdadero cuarto poder. A este respecto, he encontrado un par de cosas muy llamativas al respecto. Una en casa de Octavio Isaac Rojas y otra en Guerra Eterna, fuente siempre de muy interesantes comentarios. El de Guerra eterna está al final del post.

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