Sigo esperando

Quizás lo mejor de escribir con libertad es que sólo tienes que mirar dentro de ti para saber si lo que dices tiene alguna intención oculta, es sólo un desahogo o hay una sana preocupación por el absurdo en que vivimos. Será que me hago mayor y me aburre la falta de respeto generalizada.
Esto viene a cuento respecto de la falta de libertad que representa la corrección política, porque sigo esperando que alguno de los periódicos que leo digan algo sobre esto. Mientras tanto, los poderes públicos, siempre oportunos, nos deleitan con perlas como esta.
La declaración de apoyo, ¿incluye también la costumbre del pañuelo? ¿En qué se diferencia ese pañuelo del hiyab? ¿Hasta dónde llegan el respeto y el silencio por las costumbres ajenas? ¿Será que la cantidad de sangre establece la corrección política? Porque también la ablación es una costumbre humana de algunas etnias y a nadie se le ocurre hacer delaraciones de apoyo de los pueblos subsaharianos.
Qué pereza da este mundo en ocasiones.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El vertedero, de Djuna Barnes

Mercedes Baztán, amiga, compañera y colega

La función de la crítica, de Terry Eagleton